Con una cruz de mármol en el Edomex, la familia de Zuleyma conmemoró su primer aniversario luctuoso y recriminaron que a un año de su feminicidio, el presunto responsable no ha aparecido.
En la iglesia de San Lorenzo Tepaltitlán, en Toluca, mientras la vida se celebraba con bautizos, la familia de Zuly lloraba.
Con pancartas en la mano como resultado de la violencia feminicida, exigieron justicia.
La justicia es un anhelo ferviente, uno que no desfallece pese a las revictimización y la omisión de las autoridades.
Ana Karen Contreras Serrano, hermana de Zuly, lamentó que pese a que la víctima vivía en el Edomex, las autoridades mexiquenses han colaborado poco para esclarecer lo que le sucedió.
“El 15 de abril mi mamá recibió una llamada diciendo que supuestamente se había bajado de un vehículo rumbo a Querétaro y todas las investigaciones apuntan que su pareja, Edgar Rivera Arellano, alias Ricardo, es quien tuvo que ver con su feminicidio”.
Por este sujeto, existe una ficha de búsqueda y una recompensa de 100 mil pesos activada por la fiscalía michoacana, pue fue localizada en el municipio de Zinapécuaro 29 días después de que su pareja la reportara como desaparecida con su familia.
“Hasta el día de hoy sigue desaparecido, no sabemos absolutamente nada de su paradero, y exigimos justicia, exigimos que pronto esté tus las rejas para que pague lo que le hizo a mi hermana”.
Tras una misa, la familia de Zuleyma se encaminó al panteón municipal de Toluca para colocarle una cruz de mármol a su tumba.
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La última morada de Zuly permanece sin loza porque las investigaciones continúan y sólo está adornada con flores y una promesa de justicia para la joven a quien le sobrevive un hijo de 15 años.
“No queremos que él ande libre (el presunto feminicida), no queremos que le vuelva a hacer daño a nadie más y, sobre todo, a las autoridades les exigimos, porque ya me cansé de pedirles por favor, les exigimos que hagan su trabajo porque eso es lo que le pedimos, que hagan su trabajo, no más, que dejen de revictimizaarnos, que dejen de decir que nada más vamos a hacer lío, y que se pongan a trabajar, es lo único que pedimos”.
Actualmente, la memoria de Zuly es el empuje de sus hermana y de su madre para seguir andando por lo que piden que la Fiscalía mexiquense colabore con la michoacana para que el sujeto que le arrebató la vida, pague por ello.