Desde hace tres años, Antonia, madre de Sandra Karina García Alemán quien fue asesinada el 18 de mayo de 2020 en el municipio de Temascalapa, lucha para que la memoria de su hija tenga justicia; sin embargo, aunque el feminicida ya está sentenciado a prisión vitalicia, metió un recurso de apelación por lo que teme que le reduzcan la sentencia.
Para Antonia, la lucha no ha sido sencilla. Luis, quien asesinó a su hija, intentó hacer pasar la muerte de Karina por una congestión etílica; sin embargo, la autopsia reveló que la joven falleció debido a una asfixia mecánica por estrangulamiento.
Ahí comenzó el calvario de Antonia que hoy la llevó a protestar frente a la sede de Toluca del Poder Judicial del Estado de México, tan sólo durante 2022, los jueces del Tribunal de Alzada redujeron -al menos- cinco sentencias en casos de feminicidio.
“No es justo que le reduzcan las sentencias a estas personas porque ellas… Él va a salir algún día si se la reducen, él sigue respirando, él sigue aquí y su familia puede ir a verlo cuantas veces quiera, yo a mi hija ya no la voy a ver nunca, ya no la voy a ver, traigo una silueta a la que le puse: Que Luis salga de la cárcel cuando Karina salga del cementerio”.
En México, en los últimos diez años se han registrado siete mil 246 feminicidios y menos del 25% de esos crímenes ha terminado en una sentencia condenatoria.
Es decir, de acuerdo con la investigación Feminicidas libres de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad publicado el año pasado, sólo 23.32% de los feminicidios terminan en una sentencia condenatoria.
Protestan contra jueces que revictimizan
La reducción de sentencias de feminicidas en los últimos meses enfureció a las familias de las víctimas por lo que este martes se manifestaron frente a la sede del Poder Judicial del Estado de México. Exigieron que se deje de revictimizar a las familias de quienes fueron arrancadas a causa de la violencia de género.
“Nos ha costado un buen de trabajo llegar a, primero a que los detengan, después a llegar a una sentencia y pues, se nos hace demasiado absurdo que, cuando creemos que vamos a tener un poquito de justicia y de paz, vienen estas apelaciones y pues creo que no es válido para nuestras hijas”, recriminó Karen Reyes, madre de Renata Martinely, asesinada en Ixtapaluca el 29 de noviembre de 2020.
Explicó que, en al menos tres casos de femincidio, se otorgó la reducción de sentencia a los feminicidas debido a un recurso de apelación, ya que son otros jueces y otros ministerios públicos los que participan en el proceso e incluso muchas veces los testigos del caso ya no están localizables.
Con la consigna “Los ojos de nuestras hijas juzgarán las apelaciones de este tribunal. No a la reducción de sentencias” y más de 100 siluetas moradas, las madres, hermanas e hijas de las víctimas de feminicidio exigieron al presidente del Poder Judicial mexiquense, Ricardo Sodi Cuellar, su intervención para impedir que se sigan dictando estas resoluciones “que no hacen otra cosa que favorecer a los culpables de asesinar a mujeres”.