En el barrio de La Concepción Coatipac, del municipio de Calimaya, cada año se revive la Batalla de Cinco de Mayo entre mexicanos y franceses. Desde hace más de un siglo, la población se organiza para conmemorar la victoria de Ignacio Zaragoza sobre el Ejército francés en Puebla.
Según los lugareños, la tradición inició en 1910 debido al nombre de la escuela más representativa del barrio, nombrada en honor al general Ignacio Zaragoza.
La comunidad se une para preparar trajes, comida y banderas, ya que después de la batalla hay una verbena. No es un esfuerzo de las autoridades, sino de una población orgullosa de sus raíces y de representar la victoria del Ejército Mexicano.
El grito de «Viva México, que muera Francia» anuncia el inicio de la representación, donde los participantes se preparan para los enfrentamientos. Los tambores comienzan a sonar temprano en la mañana, mientras que los fusiles se cargan y los soldados, indígenas y adelitas toman las calles bajo las órdenes de Ignacio Zaragoza.
Niños y adultos mayores se unen a la representación, demostrando el orgullo que sienten los mexicanos por este episodio histórico. Los enfrentamientos son intensos, con gritos de «¡Que muera Napoleón III, que los franceses se regresen por donde vinieron!» y el sonido de la pólvora llenando el aire.
La representación se detuvo por dos años debido a la pandemia de covid-19, pero regresó en 2022 con renovado entusiasmo. La comunidad de La Conchita Coatipac rinde homenaje a los valientes mexicanos que hicieron historia, celebrando con una verbena que fortalece los lazos sociales.
La Batalla de Cinco de Mayo es una conmemoración colorida en El Barrio de la Conchita, donde todos participan con seriedad y orgullo, asegurando que esta tradición los llena de identidad.