La música es alimento para el alma y rompe el trajín en medio de una urbe, es por ello que Diego, Jaime y César, los integrantes Pachicolombia cumbia colombiana se apoderan del cruce de Leona Vicario y Real de Arcos en Metepec, lo hacen sin prisa pero con todo el ritmo.
Son músicos que se formaron por su cuenta y que cuando coincidieron en el camino, decidieron democratizar el acceso al baile, al rito de las percusiones y hacerse famosos de manera orgánica.
“Éramos unos músicos hueseros en busca de feria, de varo y en el camino nos encontramos y congeniamos bien personalmente y decidimos involucrarnos en este aspecto musical que poco a poco ha ido creciendo el proyecto, conforme el desarrollo de los avances económicos y se ha dado gracias a quien se deba”.
Son jóvenes que con cada compás buscan ganarse la vida, mejorar sus instrumentos y habilidades así como ganarse un espacio en la escena musical del Valle de Toluca, así que si los ve por la calle, no olvide retribuirles sus dotes musicales, seguro le sacan más de una sonrisa si pone atención .
“Es buen crucero, sale la moneda de este lado y la gente tiene buena vibra y está bueno trabajar por aquí. Nos llama la aventura, tal vez el ser callejero, tal vez el no tener vergüenza, el no tener miedo al qué dirán, simplemente exponer como cualquier cosa sin afectar a nadie”.
Tan pronto como el semáforo se pone en rojo, la tarola se coloca, el acordeón suena y las percusiones no dejan de resonar. Son apenas 30 segundos de pura cumbia colombiana, pero los automovilistas los agradecen.
Pasan por sus monedas mientras van tocando, Diego no deja de cantar y de agradecer el dinero que les llega, eso sí, en cuanto ven una nube de lluvia, guardan los instrumentos y se van. NO hay necesidad de mojarse, asegura.
“A veces me vengo por esta sólo para escucharlos, vas manejando, clavada en tus rollos y el ritmo de sus canciones sí o sí te rompe el pensamiento. Se agrede y mucho, ya soy su fan”, comentó Ana Karen, vecina de Toluca.
En el Edomex, los artistas callejeros son tolerados, por lo que los músicos de Pachicolombia aprovechan y hacen un llamado a la tolerancia para quienes salen a las calles a ganar unos pesos ya que su oficio les requiere un público cautivo, aunque sea sólo por 30 segundos.