Durante dos años, Lizbeth Portillo ha buscado justicia para su hijo de 9 años, quien reveló haber sido víctima de abuso infantil por parte de su abuela paterna, mientras su padre era testigo. Pero un juez decidió que el menor regresara a vivir con sus presuntos violentadores.
Organizaciones como Más Vida Más Igualdad han alertado sobre el incremento de casos de abuso infantil en el Valle de Toluca. Solo en 2023, atendieron 70 casos en la zona metropolitana, resaltando la urgencia de abordar esta problemática de manera efectiva.
En el Estado de México, el abuso infantil conlleva penas severas, que pueden llegar hasta los 27 años de cárcel si es cometido con violencia.
El caso de Lizbeth
A pesar de las denuncias presentadas ante la Fiscalía General de Justicia del Edomex, las medidas de protección para el menor aún no se han materializado. Esto porque un juez del Poder Judicial estatal decidió reintegrar al menor a la casa donde fue víctima de abuso infantil.
Lizbeth, angustiada por proteger a su hijo, exige que se tomen acciones concretas para garantizar su seguridad.
A esto se le suma que a ella se le impusieron visitas controladas, por lo que teme que el menor vuelva a estar expuesto a situaciones traumáticas.
Frente al Centro de Justicia para la Mujer, Lizbeth insiste en la judicialización de las denuncias, respaldada por pruebas periciales que confirman el abuso sufrido por su hijo.
Además, teme que las decisiones judiciales no estén considerando el bienestar del menor, al reintegrarlo a un entorno donde se siente vulnerable.
La lucha con el abuso infantil
Las colectivas «Aquí está mamá» y «Sombras libres Otzolotepec» han brindado su respaldo a Lizbeth y otras víctimas en situaciones similares, destacando la importancia de la solidaridad en casos de abuso infantil.
