Lupita, originaria de Temoaya, fue detenida el 4 de julio del año pasado por ser la presunta responsable de los delitos de feminicidio en grado de tentativa y secuestro en contra de la actual pareja del padre de sus hijos.
Desde ese día se encuentra recluida en el penal de Almoloya de Juárez donde espera que se resuelva su situación jurídica; sin embargo, su familia asegura que es inocente.
“Ahorita ella está separada de sus hijos, ella está recluida en Santiaguito Almoloya de Juárez, ya más de 307 días que está privada de su libertad y ella es inocente”, comentó Cecilia González, hermana de Guadalupe.
Para visibilizar el caso, la colectiva CAM-CAI, conformada por madres víctimas de violencia vicaria, y la familia de Lupita se manifestaron en las insolaciones centrales de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México en el marco del Día Internacional para la erradicación de la Violencia Vicaria.
“Hoy me acerco aquí a la Fiscalía a pedir libertad y justicia para María Guadalupe que es mi hermana, porque es inocente y, en un momento, ya me había acercado aquí a Fiscalía y me acercaron al área de litigación, ahí revisaron carpetas y me comentaron que ‘¿cómo era posible que mi hermana estuviera privada de la libertad?’ y que ellos me iban a ayudar en el área de litigación con la maestra Elvira, pero no sucedió nada”.
A Guadalupe la acusaron incluso de abuso sexual en contra de hijo, pero este cargo ya fue desechado pues sus pequeños han negado el hecho además de que, reconocen, la extrañan más que nunca.
“Que ya la saquen de allí porque mi hermano y yo la necesitamos mucho”, dijo Miriam, la más pequeña.
Lupita era víctima de violencia
De acuerdo con la familia de Lupita, la joven madre de dos, vivió todo tipo de violencia dentro del matrimonio y, aunque fue denunciada, la investigación no procedió.
Además, fue en 2017, señalan, decidió separarse de su pareja porque se dio cuenta de que le era infiel sin que eso significara el fin de la violencia que vivía, pues después de intentar solicitar la pensión alimentaria así como la guarda y custodia, la denunciaron por feminicidio en grado de tentativa, secuestro y abuso sexual.
Además, defendieron que nunca convivió con supuesta la víctima y que en primera instancia la denuncia fue por lesiones y le pedía 30 mil pesos para otorgarle el perdón.
Aumenta la violencia vicaria
La violencia vicaria es un término relativamente nuevo que se refiere a la violencia que busca dañar a la madre a través de sus hijos o para separara de ellos. Se trata de una forma extrema de violencia de género y, en muchas ocasiones, los violentadores recurren a fabricar acusaciones penales.
En el Estado de México, la violencia vicaria ha sido reconocida en la Ley de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia; sin embargo, no está tipificada en el Código Penal.
Desde la entrada en vigor de esta ley, se han detectado alrededor de mil casos de violencia vicaria en la entidad.
La colectiva Cam-Cai ha sido una de las principales organizaciones que ha denunciado y visibilizado esta problemática.
“Existen denuncias que son fabricadas, denuncias falsas en contra de las mueres, en contra de las madres, obviamente esto para seguirles haciendo daño, manipulándoles y también lo usan, usan a los menores, a las infancias, como rehenes para seguirles haciendo daño. Entonces pues sí exigimos el día de hoy justicia y libertad, sobre todo”, comentó Isaura, integrante de Cam-CAI.
Los efectos de la violencia vicaria pueden ser devastadores en los hijos e hijas de las víctimas, quienes son testigos de lo que sufren sus mamás, lo que se agrava cuando hay un proceso judicial de por medio.
Esta forma de violencia no sólo afecta a las víctimas directas, sino que también tiene un impacto profundo en las familias y en la sociedad en general.