Estudiantes en paro de la Universidad Autónoma del Estado de México marcharon este martes desde la Casa del Estudiante hasta UniRadio, en Metepec, para exigir que se reconozca al Enjambre Estudiantil Unificado y se abran los medios universitarios a sus voces sin filtros. La movilización, titulada Un lugar en el que permea la voz, se realizó en completo silencio como forma de protesta y en memoria del Halconazo de 1971.
Durante el recorrido, el contingente hizo paradas frente al Edificio Administrativo de Rectoría, el Monumento al Maestro y la Preparatoria 5. La marcha avanzó sin consignas, pero con carteles visibles que decían “Callamos por respeto, no por miedo”, “Estudiar arte no es un privilegio” y “Ni perdón ni olvido”.
La transmisión desde UniRadio
Frente a UniRadio, las y los estudiantes ocuparon las escalinatas y tendieron mantas en el piso. La emisora universitaria había anunciado que contaría con condiciones técnicas para transmitir en vivo el pronunciamiento estudiantil, lo cual se concretó a través de una cabina externa instalada frente al edificio.
Una estudiante de la Facultad de Artes leyó el posicionamiento. En su intervención, denunció amenazas sobre la conclusión del semestre, campañas institucionales para desacreditar el paro y el silencio sistemático de las autoridades ante las demandas presentadas desde hace más de un mes. Aseguró que el movimiento estudiantil no está cerrado al diálogo, pero exige que su palabra no sea filtrada ni deslegitimada.
“La lucha en la que estamos merece ser vista y escuchada por cualquier medio. Hoy llegamos en silencio a un lugar donde permea la voz, porque el silencio también escandaliza”, expresó durante la transmisión.
La postura institucional y el cierre simbólico
Más tarde, la Universidad confirmó la realización de la transmisión a través de una tarjeta informativa emitida por la Dirección General de Comunicación Universitaria. En el documento se informó que integrantes de la Comisión Especial para el Diálogo recibieron al contingente y que la participación se desarrolló con el apoyo técnico de la emisora.
Durante más de una hora, estudiantes compartieron micrófono. Expusieron que no buscan enfrentamientos, sino condiciones reales para ser escuchados. Reiteraron que sus demandas no se reducen a lo académico. Incluyen también la exigencia de espacios donde puedan nombrar lo que viven.
Frente a UniRadio, el mensaje quedó grabado en carteles, en voz directa y en los cuerpos presentes. El silencio fue parte del discurso. Lo que está en disputa no es solo el uso del micrófono, sino el derecho a ocuparlo sin permisos condicionados.
