Unidades de rescate del Estado de México lograron salvar a tres personas que quedaron sepultadas por un deslave en Jilotzingo, específicamente en el cerro de la comunidad de San Luis Ayucan. Sin embargo, una bebé murió.
Las labores de rescate se activaron tras el desbordamiento de un río y el colapso de un cerro que afectó varias viviendas en la zona.
La Coordinación General de Protección Civil y Gestión Integral del Riesgo del Estado de México informó que las personas rescatadas incluyen a un niño de 12 años, una niña de 10 años y una mujer de 34 años.
Estas tres víctimas fueron trasladadas al Hospital de Traumatología de Lomas Verdes para recibir atención médica especializada.
Operativo de emergencia por deslave en Jilotzingo
Más de 130 elementos de diversas instituciones estatales y federales, junto con 34 vehículos especializados, se movilizaron para las tareas de auxilio por el deslave en Jilotzingo.
Entre el equipo utilizado se incluyeron cuatro máquinas de excavación para facilitar las labores de búsqueda y rescate.
Dos refugios temporales se establecieron para los afectados: uno en la Iglesia de San Luis Obispo y otro en una vivienda particular de la comunidad, con el objetivo de brindar resguardo a las familias que tuvieron que evacuar sus hogares debido al desastre natural.
Coordinación interinstitucional en Jilotzingo
La Coordinación General de Protección Civil instaló un Centro de Comando de Incidencias, desde donde se llevan a cabo las labores de emergencia en conjunto con la Secretaría de la Defensa Nacional, Secretaría de Marina (Semar), Guardia Nacional, Cruz Roja Mexicana y Protección Civil estatal.
Dos binomios caninos de la Marina, elementos de la Secretaría de Seguridad del Estado de México y voluntarios de la zona también se sumaron al operativo.
La gobernadora Delfina Gómez Álvarez ordenó desde la noche del 13 de septiembre la atención inmediata para las familias afectadas y las viviendas dañadas en San Luis Ayucan. El desbordamiento del río, combinado con las fuertes lluvias, fue lo que ocasionó el deslave del cerro y los graves daños en la comunidad.
Las autoridades continúan monitoreando la situación para prevenir riesgos adicionales y mantener la seguridad en la zona afectada.